Multinacionales y el estado-nación

«Ante el ascenso de las multinacionales, el estado-nación ha dejado de ser un instrumento económico adecuado para la burguesía. Pero sigue necesitándolo para auto-defenderse. Necesita al estado para defender sus intereses particulares frente a los competidores extranjeros. Necesita el estado para amortiguar los choques de las crisis económicas y sociales. Necesita el estado para reprimir en caso de crisis socio-económicas explosivas. En la medida en que el estado nación le es menos útil, tiende a sustituirlo por instituciones supranacionales. Pero para que estas adquieran funciones comparables a las estatales, hay que superar importantes obstáculos políticos, culturales, ideológicos. Y acaba siendo mucho más complicado que lo previsto inicialmente.»

Ernest Mandel. Párrafo de un artículo de E. M. escrito en 1992 para la revista belga Le Gauche.